Planificación: porque cada situación es diferente
La planificación comienza con una comprensión clara del trabajo que se va a realizar. ¿Cuáles son las expectativas y las dificultades? ¿Cómo puede asegurarse de que la tarea se puede completar de la forma más segura posible?
Como verá, la planificación no es un viaje de A a B, sino algo mucho más dinámico: un proceso continuo de identificación y evaluación de los riesgos en cada etapa, incluso mientras se realiza el corte. Esta comprensión de los riesgos es la que dirige sus decisiones de planificación, desde los métodos de trabajo que elija hasta las herramientas que utilice, mientras se centra en minimizar los riesgos.
¿Cuáles son los mayores riesgos que se derivan de lo que hay que hacer? ¿Hay árboles colgantes? ¿Se han asegurado los caminos y vías? ¿Qué métodos de trabajo son preferibles para reducir los riesgos más grandes? ¿Qué herramientas necesita para los métodos de trabajo que ha elegido? ¿Cuáles son los riesgos al utilizar estas herramientas y cómo puede reducirlos? Hay muchas cosas que tener en cuenta y de las que ser conscientes.
Una planificación cuidadosa es vital: no se debe pasar nada por alto ni dejar nada al azar. ¿Cuentan usted y su equipo con la formación, las habilidades y las herramientas necesarias para hacer el trabajo? En caso de duda, no continúe hasta estar seguro de que están listos. ¿Va todo como estaba previsto? Si no es así, prepárese para ajustar su plan. La seguridad es lo primero, siempre.