Ejecutar y ajustar
Ahora que ha realizado y seguido cuidadosamente cada paso del plan de trabajo, usted y su equipo están listos para ejecutar el plan. Aquí es donde todo el tiempo y el esfuerzo invertidos en la inspección del lugar de trabajo, la EVA, la evaluación de riesgos del lugar de trabajo y la decisión de un método de trabajo adecuado realmente compensa. Esto aumenta la probabilidad de completar la tarea de forma segura. Pero recuerde: un buen plan no está grabado en piedra. Lo más probable es que tenga que ajustarlo a medida que realiza su trabajo.
Pregúntese siempre: «¿Puedo proceder según lo previsto?»
Incluso con los mejores planes, trabajar en la tala avanzada de árboles o en un bosque asolado por tormentas siempre conlleva riesgos. Su prioridad principal siempre debe ser minimizarlos, incluso mientras usted y su equipo ejecutan el plan. Después de todo, las cosas no siempre salen exactamente como se planeó o se esperaba. Así que, después de cada paso de su plan (mover, cortar, etc), compruebe cómo van las cosas. Reflexione. Cuestiónese el plan. ¿Puede continuar como estaba previsto? Esta mentalidad o enfoque para trabajar en situaciones avanzadas es vital. Le permite ajustar y mejorar continuamente el plan de trabajo original.
Puede que incluso tenga que hacer ajustes en pleno corte. Al hacer un corte en un bosque asolado por una tormenta, tal vez note que el tronco se está flexionando o doblando de una manera que no se esperaba. Así pues, se detiene para ajustar su plan. En este caso, puede que solo se trate de ajustar la posición de los pies.